 | jj CORRESPONDENCIA ASTROLÓGICA LUNA  I CHING 2- K'un. La Respuesta natural. CORRESPONDENCIA MITOLÓGICA Eurifone, Maya, Nut, Isis-Neftis, Eva-Lilith, Demeter-Persefone. Todas las reinas del cielo como dadoras universales y nutridoras de todo lo creado. JJ |
Representa nuestra intuición, el don de la adivinación y corrobora esa certidumbre profundamente enraizada que sentimos al
plantear el motivo de nuestra consulta. Se trata de una verdad misteriosa que conocemos aunque se sustraea la captación de
nuestra mente consciente. La carta presenta una casi total simetría; en su lado luminoso es expresión de indulgencia, bondad
y disposición al perdón. Se trata de una que persona que como auxiliadora, clarividente o benefactora usa la fuerza de su inconsciente en beneficio de otros.
Su lado sombio corresponde al arqutipo de "la hermana oscura", de la bruja que usa su energia mental para seducir, paralizar o dañar a los demas. De cualquier manera la interpretación clásica de las cartas del tarot siempre ha destacad su lado amigable y proclive a la ayuda. Tradicionalmente es considerada como una carta protectora; en la tradición cristiana se dice que el heroe que está bajo la advocación de la virgen es invulnerable.
A nivel profesional.
Puede indicar que nuestra actividad está en consonancia con los temas de esta carta, sicología, terapia, esoterismo. A un nivel más general hace referencia a que afrontamos nuestar actividad cotidiana con grandes dosis de paciencia y sinceridad, que aceptamos nuesvos estimulos y alicientes como viajes u otros retos profesionales con entereza y que en última instancia nuestra decisión última depende siempre de nuestra voz interior. En la medida en que esta postura se acepte en modo reflexivo y juicioso, tendremos la gratificante sensación de sentirnos guiados . Si por el contrario la influencia de esta carta se desborda, nuestro comportamiento ante los demas cobraráun cariz, imprevisible, azaroso y a veces hasta amenazador.
En el ámbito de nuestra conciencia.
Esta carta representa una época en la que dirigimos nuestra atención a las imágenes que nuestra alma proyecta en nuestro subconsciente, nos abandonamos a sueños creativos y a fantasías o en la que descendemos a las profundidades para alzar el velo de nuestra naturaleza última; el velo de isis, la albinegra. Nuestro intelecto fracasa una y otra vez en discernir lo bueno de lo malo antes de redescubrir que no existen y aceptar que la realidad que vivimos necesita de ambas cosas para nuestro aprendizaje.
En nuestra relaciones personales.
Esta carta del tarot muestra predominantemente su lado luminoso, nos habla de comprensión, afecto profundo y sutíl, proximidad, cercanía espiritual y la certeza de que un lazo invisible nos une a los demás. Si vivimos solos esta carta indica que encontramos una enorme satisfacción en esta forma de vida y que estamos pacientemente abiertos y dispuestos a encontrar una nueva relación, pero que aguardaremos pacientemente a que esta aparezca, sin forzar nada dando tiempo a que las cosas se desarrolllen en emodo natural y armónico.
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